Escondida entre las plataneras que llevan al camino de Jover, en Tejina, esta finca reconvertida en restaurante ofrece una experiencia gastronómica de kilómetro 0. Solo abre cuatro días en semana, así que las colas para entrar están aseguradas, por eso te recomendamos reservar con antelación.
El sabor local y la espléndida decoración de sus platos hacen de este lugar algo especial. El clima de la costa y la vegetación que lo rodea crea un entorno de paz, en el que tomar algo también es una buena opción, tendrás preparado una zona chill out de lo más tranquila.
El restaurante tiene un ambiente familiar y está preparado para grandes grupos, con zona infantil incluida. La parte más especial para terminar tu visita es el paseo hasta el final de la finca, donde encontrarás una pequeña granja con cabras y ponys, y una vista panorámica a La Punta del Hidalgo.
Nosotros te recomendamos probar de entrante los quesos asados acompañados de las salsas de pesto, miel de palma y almogrote, un bocado de lo más gourmet con el producto más local.
Dirección: Playa de Jover, s/n, Tejina